Hola a todos. Que tal? El tiempo está pasando y ya voy por mi pastilla numero 180. Madre mía!! He de decir que ha habido tramos en los que el tiempo ha pasado super despacio y otros que han pasado en un abrir y cerrar de ojos, pero aquí estoy, después de seis meses con la Mayesta... Las cosas han ido mejorando y la prueba de ello es que la cara me la noto mejor. La frecuencia con la que me aparece un grano es ínfima, lo cuál es una excelente noticia y pone de manifiesto que el tratamiento funciona. Las manchas, van a su ritmo. Ahora están de un color más rosita y se van notando menos, o eso creo. La verdad es que va por momentos; a veces me las noto peor y otras mejor. Supongo que el tratamiento, como hace que la piel se vuelva mucho más sensible, provoca que cuando nota un poco más de sequedad o yo que sé, las manchas se acentúen más. El mejor momento del día en la que me las veo es después de levantarme, cuando me echo la crema. Luego "va empeorando" a medida que avanza el día. La noto especialmente más marcada por la tarde-noche, justo después de ducharme y de aplicarme la crema hidratante. No sé si es que después de dormir, como la piel ha estado en calma durante muchas horas, está más relajada, mientras que a medida que avanza el día las impurezas del ambiente y la actividad del día la irritan, o que necesita más crema hidratante (no creo porque no noto ni pellejitos ni nada por el estilo), pero este es el hecho. No sé si alguno de vosotros lo habrá notado también.
Respecto a la sequedad no tengo nada que decir, sigo sin notarla. Todos los días, después de ducharme, me aplico crema por todo el cuerpo, y de hecho nunca había tenido la piel del cuerpo tan suave; me encanta. Y lo mejor de todo es que creo que estoy cogiendo unos hábitos con los que seguiré después de haber terminado el tratamiento. Los labios, pues más de lo mismo, con el cacao en el bolsillo y con vaselina por la noche no hay nada de qué preocuparse. Aunque, sí que es cierto que cuando no me echo me escuecen.
Respecto a la sequedad no tengo nada que decir, sigo sin notarla. Todos los días, después de ducharme, me aplico crema por todo el cuerpo, y de hecho nunca había tenido la piel del cuerpo tan suave; me encanta. Y lo mejor de todo es que creo que estoy cogiendo unos hábitos con los que seguiré después de haber terminado el tratamiento. Los labios, pues más de lo mismo, con el cacao en el bolsillo y con vaselina por la noche no hay nada de qué preocuparse. Aunque, sí que es cierto que cuando no me echo me escuecen.
Con respecto al Sol. Estamos en verano así que espero que todos aquellos que estéis en tratamiento tengáis mucha precaución con él. No obstante, si se siguen una serie de indicaciones no tiene porqué pasar nada. De hecho, hace poco más de dos semanas volví de la playa, y aunque pasé una semana allí no tuve ningún problema. Crema de protección total (yo uso una de ISDIN) y apañado. Además, me compré un sombrero de ala ancha para que me tapará la cara y todo fue de maravilla. De hecho bajé varios días a la playa a las horas centrales y el sombrero me vino como agua de mayo porque me cubría perfectamente; no dejaba ningún trozo de la piel de mi cara al descubierto. Aunque por si acaso llevaba puesto el protector solar (siempre que salgo de casa me lo echo). Así que os aconsejo que os hagáis con un sombrero así. Ni muy pequeño ni uno enorme como un sombrero mejicano; en el mercado hay gran variedad y seguro que encontráis uno que os quede bien. También me eché crema solar por todo el cuerpo (también de pantalla alta), excepto en los pies y esta fue la única parte del cuerpo donde me quemé un poquito, aunque nada del otro mundo.
La última cosa que quería hablaros es de las rojeces. No hay que confundir las manchas rojas y rosas con el enrojecimiento facial. Estos dos últimos meses he estado notando que me sonrojo, por ejemplo, cuando me enfado o cuando estoy muy nervioso o por cosas así, y en mi piel se refleja estos sentimientos. De hecho, cuando me miro en el espejo hay una diferencia apreciable entre esos estados alterados y si cierro los ojos y me sereno. Según el prospecto, el medicamento puede incentivar el enrojecimiento, así que no me preocupa mucho (por ahora). Simplemente, estoy intentando mejorar mi autocontrol y en la próxima cita con el médico se lo preguntaré. (A ver, es lógico que si te enfadas, por ejemplo, se te ponga la cara roja y todo eso, simplemente quiero decir que me pongo rojo con mayor frecuencia que antes).
No sé qué más contaros, como siempre si tenéis alguna duda me podéis dejar un mensaje y yo os responderé encantado. Mucho ánimo a todos!!
PD: mi próxima revisión con la dermatóloga es el 30 de agosto. Hasta esa fecha no creo que vuelva a escribir ninguna entrada más sobre el estado de mi piel porque es tontería, aunque a lo mejor escribo una sobre otro tema que seguro que os va a interesar...
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